Aunque este año ya no fui alumno de la Escuela de
Folklore Eco de los Valles de Camarzana, no quería perderme la clausura, un
acto de fin de curso donde se expone lo aprendido en las diferentes clases. Y
aún más cuando me invitaron a participar tocando el bombo con el grupo de
dulzainas. El grupo formado por alumnos de varios niveles, interpretaron el
Bolero de Algodre, una charrada, y un pasodoble muy acorde con el fin de semana
en el que estábamos (el del Toro de Benavente) ya que era el afamado pasodoble
“Cantando a Zamora” o como más se le conoce “Amigo conmigo vente”.
La
clausura, como es habitual comenzaba con los alumnos de guitarra, que
interpretaban todo tipo de canciones, no solo folklore, como por ejemplo la
banda sonora de Juego de Tronos.
Luego
llegaba el turno del grupo de pandereta. Grupo extenso, en el que brillaban por
encima de todos, los más pequeños. Niños y niñas que hacen verdaderas
virguerías con la pandereta.
Los
diferentes grupos de baile también pasaron por el escenario, siendo al igual
que en la pandereta, el de los niños el que más entusiasmó al público que
llenaba el auditorio. Todos los danzantes salían sudando la gota gorda del
escenario, debido al calor reinante durante la tarde.
La
última parte dedicada a los alumnos, estaba formada por las gaitas y las
dulzainas, que repartidos en varios grupos,
interpretaron varias canciones.
El
final de la gala corrió a cargo de invitados especiales. El primero, Luis
Pedraza que puso sobre el escenario un tema de flauta y tamboril, y otro de
gaita acompañado de Pablo Madrid al tambor.
Y para terminar, la actuación del dúo Jambrina y Madrid, interpretando
canciones de su disco “Arbolito Florido”, así como alguna canción inédita.